En la madrugada del 10 de mayo del 2024, una serie de temblores sacudieron diversas regiones de México, dejando a comunidades en alerta y despertando a muchos residentes con el temblor.
El Servicio Sismológico Nacional reportó una actividad sísmica notable, con movimientos que oscilaron entre magnitudes de 3.0 a 4.2 en la escala de Richter.
Temblores sacudieron varias regiones
El sismo más significativo, de magnitud 4.2, tuvo su epicentro a 83 km al suroeste de Tonalá, en Chiapas, con una profundidad de 16.1 km.
Otros movimientos notables incluyeron un sismo de magnitud 3.9 con epicentro a 56 km al este de San Felipe, Baja California.
Otro de igual magnitud a 107 km al suroeste de Puerto Escondido, Oaxaca.
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Aunque los temblores no provocaron daños importantes ni víctimas reportadas hasta el momento, muchos residentes expresaron su preocupación y recordaron la importancia de mantenerse preparados para emergencias sísmicas en todo momento.
Las autoridades instan a la población a estar atenta a los protocolos de seguridad y a mantener la calma ante eventos de este tipo.
El monitoreo continuo por parte de las autoridades sísmicas es fundamental para evaluar la actividad tectónica y proporcionar alertas tempranas en caso de futuros eventos.
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